Mi amiga tiene cáncer

 ¡Hola Mundo!

Este post lo trataré de la mejor forma posible con el mayor respeto para las personas que estén pasando o que hayan atravesado por una situación similar; lo abordaré de manera personal y desde la revolución de sentimientos que como amiga me invadió en este capítulo de vida que me tocó experimentar.



Recuerdo el día en que mi amiga Liz nos llamó a Christian y a mí para ir a verla al hospital parecía ser una tarde normal, calurosa y tranquila, se encontraba internada por unos síntomas extraños que le habían surgido y por los cuales se tuvo que enfrentar a diversos exámenes para poder llegar a un diagnóstico final. Recuerdo haber quedado con Christian para vernos afuera en la puerta principal, durante el trayecto en el transporte público de mi casa hacia el hospital mi mente se fue completamente en blanco, extrañada e intrigada por el llamado de Liz, pero sin si quiera pensar en el motivo por el cuál tenía que hablar con nosotros en persona. Al llegar a su cuarto de hospital, Juan su novio (qepd) se encontraba ahí, la acompañó durante todo este proceso de una manera sin igual. La vimos sonriente como era su costumbre y positiva ante la situación puesto que nos dio la noticia de una manera tan natural que ni si quiera nos dimos cuenta que la palabra principal en todo era "cáncer", en ese momento un frío nos invadió recorriendo el cuerpo desde la cabeza a los pies de cada uno de nosotros y el silencio lo dijo todo. Ninguno de los dos supimos qué hacer, Juan tuvo que hablar por nosotros. Recuerdo que salimos del hospital y durante el trayecto de regreso a casa ni Christian ni yo dijimos una sola palabra, fue un silencio y calma absoluta y estoy segura que él se encontraba igual que yo, totalmente confundido y sin entender qué seguía o qué debíamos hacer; si bien la tarea más grande le tocaba a la mente y el cuerpo de Liz, a nosotros como amigos nos correspondía alimentar su fe, sus fuerzas y sus ganas por vivir, mantenerla feliz, contenta y positiva esa era nuestra misión o por lo menos lo que estaba a nuestro alcance y así lo hicimos hasta el último momento.

Durante todo el proceso en que la diagnosticaron y comenzó su tratamiento se vino todo lo que hemos visto y conocido de historias como esta, las quimioterapias, la pérdida de cabello, los cambios de ánimo y de humor, el cuidarnos de salud nosotros para poder cuidarla a ella los días que la visitábamos, aunque no siempre lo pudimos hacer, una simple gripa siempre nos alejó de ella pero nos mantuvimos tan cerca como pudimos con las redes sociales, el celular y los detalles, organizamos reuniones cuando se podía, mis noches eran siempre desvelos platicando de muchas cosas, muchos planes, viajes que queríamos realizar juntas, tantas cosas que compartimos y aun así siento que nos faltó tiempo. Como amigo jamás te imaginas pasar por una situación como esta, Liz era aun muy joven, en ese momento pensé que no se lo merecía, una persona tan buena, tan positiva, siempre le veía lo mejor a la vida, la disfrutaba al máximo, a diario me ayudaba a superar mi perfeccionismo viendo las cosas con calma y desde otra perspectiva. La mañana en que una de sus hermanas me informó sobre su estado de salud y me pidió ir a verla al hospital acompañada del resto de nuestros amigos es un día que espero nunca tengas que vivir, para mí esa fue la primera vez, la segunda fue con mi hermano. Ese día no quise decirle adiós, le prometí que iríamos a conocer al hijo de una de nuestras amigas que estaba lejos y acababa de nacer, le dije que volveríamos a vernos muy pronto y no fue así. Sé que ella me vino a ver, a despedirse de mi, sin embargo yo no la pude ver, solamente sentir.

Una situación como esta te enfrenta a la vida de golpe porque te deja sin rumbo, sin dirección y te arranca una parte del corazón que jamás se vuelve a llenar. Los procesos de enfermedad no son sencillos de acompañar, cualquiera que sea el padecimiento es difícil para quien lo está atravesando así como para el que acompaña, muchas de las veces no sabes qué hacer, te obligas a estar feliz para que la otra persona lo esté también mientras que por dentro tu vida está rota e intentas unir los trozos para sobrevivir y darle vida a esa otra persona. El momento llegó y después de esto Liz se fue.

Sufrí depresión funcional y nadie a parte de mis padres se dio cuenta de ello, yo lo descubrí cuando comencé a escribir un diario para Liz, me di cuenta que tenía un duelo no resuelto y no sabía cómo manejarlo. Desde ese momento la escritura se convirtió en mi terapia, me ayudó a sacar el dolor incomprendido que tenía reprimido y te digo que si necesitas sacarlo hazlo de la manera en que a ti te funcione, pero no te quedes con nada, para las demás personas fue solo una amiga, para mi era mi hermana la primera que perdí, el segundo fue mi único hermano de sangre. No estás sol@ en esto, nunca estamos solos.



Liz se fue hace once años y mi hermano hace tres. Los duelos se han resuelto de alguna manera, los sigo recordando con mucho amor pero no dejan de doler algunos días.


Gracias por leer.



El Miedo...

 ¡Hola mundo!

Hoy vamos a hablar sobre el miedo, ese que te da tan solo con escuchar y leer esa palabra, ¡Oh sí! El miedo es una emoción natural caracterizada porque provoca una sensación desagradable e intensa ante la percepción de un peligro, real o imaginario. Es también uno de los principales motivos de auto sabotaje, algo que de una manera inconsciente nos lleva a no realizar alguna actividad personal o laboral.

¿Por qué abordar este tema? La mayoría de los temas que elijo para escribir es por alguna experiencia propia o bien cercana a mí, suelo ser el tipo de persona que sobre analiza las frases y las situaciones, poseedora de un punto de vista diferente a los de las personas la mayor parte del tiempo.



En algún punto de tu vida te haz llegado a preguntar ¿por qué no pude lograr o hacer algo en X momento?, siempre que nos hacemos esa pregunta respondemos mil y una excusas que se nos ocurren y todas suenan válidas y aceptables, pues es más fácil bloquear lo que realmente está pasando por nuestro cerebro a ver lo que hay en el contexto de la situación. De manera personal me creo capaz de hacer las cosas pero no lo siento y es algo confuso, dentro de mi ser sé que puedo lograrlo porque soy muy buena planeando y ejecutando pero para el momento en que comienzo la ejecución ya pasaron mil ideas tormentosas y pensamientos negativos dentro de mi cabeza, donde tuve que darme terapia a mí misma para convencerme de qué es posible realizar eso que estoy visualizando; lo he logrado pero hay muchas otras cosas que me hubiese gustado haber hecho y que por miedo y auto sabotearme no me lo permití.

A veces es abrumador escuchar a las personas que te conocen y que saben de lo que eres capaz estar diciéndote una y otra vez que sí puedes y no lo digo en mala onda, eso es alimento para el alma de cualquier persona, es un aliciente para el miedo, pero para el bloqueo mental no lo es, es un tema más a resolver porque sientes que puedes fallarles a todas esas personas que confían más en ti que tú mismo.

Te quiero decir que si tú eres una de esas personas como yo que le da miedo su éxito, capacidades y talentos; está bien que tengas miedo, es normal y es válido, no siempre vas a creer que puedes, pero como lo dice la tan trillada frase de "hazlo aun con miedo, pero hazlo" así tal cual como el Borras, programa tu mente con el ¡sí puedo! para que ese miedo no sea mayor, créetela, confía en ti mismo y si aun así crees que no puedes solo, apóyate en tu red de confianza, inspírate en otras personas, puedes lograr todo lo que te propongas porque no hay nadie más que sea como tú, no permitas que el miedo controle tu vida y recuerda esto siempre:

"Solo hay algo más grande que tus miedos y eso eres tú mismo. ¡Eres grande!" 


Gracias por leerme.



La vida se ha vuelto diferente

 ¡Hola mundo!

Aquí estoy de nuevo. Tal cual como el título de este post es como me siento al día de hoy, la vida se ha vuelto diferente, el 2023 se tornó en un año complicado, después de aquél 2020 con pandemia y la muerte de mi hermano (NO a causa de la pandemia). Hoy no voy a hablar sobre cosas a mi alrededor voy a hablar un poco sobre mi a manera de diario personal y quizás haya alguien por ahí que también se sienta identificado con mis palabras y sentimientos, no estás solo, hay muchos como yo con nudos mentales aun por resolver.



Este año en particular me ha venido complicado y he tenido que enfrentarme a sentimientos que antes no había experimentado, aunque no lo parezca y por las personas que me conocen, soy esa clase de individuo que puedes verlo sonreír, bromear, hablar mucho o hablar casi nada pero que nunca notarás si está triste, si tiene una crisis de ansiedad o si solo quiere sentarse y ver la vida y a todo el mundo pasar frente a él. 

A finales del año pasado regresé a mi antiguo trabajo el cual dejé por falta de crecimiento personal y profesional, ya no me sentía cómoda con él y conmigo misma, me sentía estancada en un pozo sin salida, no me veía haciendo cosas nuevas, con retos, ni con aspiraciones, simplemente quería salir de ahí. Luego de darme cuenta que fui victima de mobbing laboral por casi 2 años y que nadie hizo nada, ni yo misma hice algo por detenerlo (aun estoy sanando esa parte de mi que no hizo nada por ella misma en ese momento); todo eso me hizo mucho daño interiormente, mi cabeza se volvió un enredo de sentimientos encontrados que no pude resolver mas que huyendo del centro de todo esto. Aun así regresé e intenté trabajar esa parte pero creo que no fue la mejor decisión, por lo que decidí nuevamente irme de ese lugar, al instante supe que realmente no era lo que quería para mí en ese momento y aunque la segunda despedida fue más complicada que la primera, a inicios de este año logré soltarlo definitivamente, aunque ahora llevándome a muchas personas en mi vida y en mi corazón, eso hizo más llevadero mi nudo mental.

Apenas unos meses después de estar en el proceso de soltar, me viene la sorpresa de que el estado de salud de mi mamá mermó a tal magnitud que nos movió tanto el piso a mi papá y a mi pues somos los únicos que estamos como los 3 mosqueteros y aunque a veces no nos queramos ni ver nos tenemos que aguantar (jaja). No supimos cómo sucedió pero de un momento a otro tuvimos que llevarla a emergencias y vivir los peores días de nuestra vida llenos de angustia, incertidumbre, dolor, cansancio, hambre, soledad, sí, porque nos sentimos muy solos, con poca ayuda a nuestro alrededor, el miedo nos invadió a todos de manera descomunal y hasta el día de hoy seguimos en la lucha pero con más claridad.

Hemos tenido muchas pérdidas materiales y humanas, miembros de la familia que han fallecido, amigos cercanos, conocidos y todos nos han movido y conmovido mucho, quizás por el proceso de duelo que nos tocó vivir a nosotros. Desde niña la empatía ha sido uno de los valores que he aprendido en casa a manera de ejemplo y es algo que llevo siempre conmigo. Sé que este año a pesar de que esperaba celebrar mi cumpleaños en el mes de diciembre a lo grande con un gran festejo como es costumbre en mi familia ahora no será posible (por si gustan enviar regalo hay mesa en amazon jaja), no tengo un empleo fijo que me ayude a sustentar ese gasto y los ahorros se han ido desvaneciendo poco a poco en necesidades de casa para que mis papás que se encuentran en su etapa de adulto mayor tengan una mejor calidad de vida y un hogar seguro, no me quejo pues ha sido la mejor inversión que he hecho en toda mi vida, no en mis compras innecesarias y viajes que me hacían muy feliz, hoy lo comparto con ellos y me pone mucho más feliz verlos contentos a ellos en su casita de manera más cómoda.

La vida se volvió diferente en muchos aspectos y todavía nos queda un largo camino, tenemos miedo pero sabemos que estando unidos y con el angelote que tenemos cuidándonos todo saldrá bien. Por mi parte estoy consciente que en algún momento será el tiempo de alguien más y que si es la voluntad de Dios la aceptaré y enfrentaré como lo he hecho hasta el día de hoy, solo quiero decir que disfrutes lo que tienes; la familia que tienes así sea grande o pequeña, si tienes trabajo, si no lo tienes también disfruta el tiempo de libertad, todos los momentos cuentan, todas las personas que están ahí son importantes las que no por algo no lo están y así debía ser, sé raro o diferente y disfrútalo, sé tú mismo, ámate tal y como eres, no juzgues a las personas ni los trates mal, sé más empático, piensa más en tu entorno, no hables nada más por hablar si lo que vas a decir daña a alguien mejor no abras la boca,  vive y deja vivir pero también convive, conoce y disfruta.

Gracias por leer.
Hasta la próxima.